Este seminario se considera preparatorio para la III. Jornada de Medicina Evolucionista con el mismo título

El sistema inmunológico ha evolucionado a preservar al hospedador del ataque de micro-organismos y parásitos. Algunos parásitos completan su ciclo sin problemas cuando el hospedador muere, incluso la muerte puede ser de ventaja en el caso que su próximo hospedador fuera un depredador. Sin embargo, para muchos patógenos la muerte precoz del hospedador es desventajosa, porque requiere del contacto con otros hospedadores de la misma especie para propagarse. Este sería el caso de algunas infecciones víricas que se transmiten por el aire y en especial en las enfermedades de la infancia, donde es siempre necesario un pool de personas no previamente infectadas y con inmunidad para que la propagación de este virus no se encuentre en un callejón sin salida. Surgen así las enfermedades endémicas.

Esto ha conducido para muchos patógenos a la disminución de la severidad del ataque o incluso a la inducción concomitante de mecanismos reguladores. Así para muchos patógenos se ha establecido una relación realmente ecológica de tolerancia mutua.

            La hipótesis de la higiene, que se ha debatido el la jornada del año pasado postula entre otras que una multitud de mecanismos inmunológicos requieren un input necesario para su correcto funcionamiento. Es decir, se ha establecido una cierta dependencia del hospedador de ciertos micro-organismos o parásitos, que el sistema inmunológico prevé contactar, y cuando estos no están, pueden producirse las alteraciones que conducen a las enfermedades alérgicas o inflamatorias crónicas en el contexto de la hipótesis de la higiene.

            Este seminario pretende debatir cuales -de la multitud existente en nuestro entorno o aquellos que han existido y ya no se encuentran- serían estos micro-organismos o parásitos con los que nuestro sistema inmunológico se ha desarrollado.