Las parasitosis en la historia de la humanidad

Las culturas china, india, persa, babilĆ³nica, egipcia, etc. conocieron parĆ”sitos macroscĆ³picos, enfermedades parasitarias y remedios para su tratamiento. La menciĆ³n de ectoparĆ”sitos se encuentra ya en el Antiguo Testamento y en el Talmud. En el papiro de EberĀ  se hace referencia al paludismo y a gusanos. En el Antiguo Testamento se dan normas higiĆ©nicas para evitar la trasmisiĆ³n de enfermedades, obligando a incinerar los restos de animales utilizados en los sacrificios y a realizar las deposiciones en zanjas fuera del campamento cubriĆ©ndolas despuĆ©s con tierra. En algunas partes se habla de lo que podrĆ­a ser un tipo de leishmaniosis cutĆ”nea. La primera descripciĆ³n de lo que parece ser una patologĆ­a malĆ”rica se encuentra en un documento del emperador chino Huang Ti. El poeta griego Herodoto citaba cĆ³mo los egipcios usaban mosquiteras. HipĆ³crates describiĆ³ las fiebres terciana y cuartana, relacionando su existencia con las aguas estancadas. AristĆ³teles conociĆ³ oxiuros, ascĆ”ridos, tenias humanas, la cisticercosis porcina, quistes hidatĆ­dicos y algunos parĆ”sitos de peces. DioscĆ³rides citaba ā€œlas lombrices que suelen engendrarse en el vientre a manera de pepitas de calabaza. Galeno redescribiĆ³ tercianas, cuartanas, hidatidosis y ascariosis. La medicina Ć”rabe alcanzĆ³ gran desarrollo con Rhazes y Avicena estudiando helmintos y describiendo la vena medinensis. En AmĆ©rica ya se conocĆ­an los parĆ”sitos en tiempos precolombinos. Francesco Redi demostrĆ³ que las larvas procedĆ­an de huevos de moscas y Luis Pasteur que la generaciĆ³n espontĆ”nea no existĆ­a. Con el perfeccionamiento del primer microscopio por Anton van Leeuwenhoek ParasitologĆ­a entrĆ³ en una nueva era.